9 de junio de 2008

W. Eugene Smith

Centro de Arte Fernán Gómez (antes conocido como Centro Cultural de la Villa, ay).
Del 3 de junio al 27 de julio de 2008.


Llega el mes de junio, y con él una nueva edición de Photoespaña, decenas de exposiciones de fotografía repartidas por todo Madrid, unas seguro que buenas, otras quizá no tanto. Como son más las ganas que el tiempo disponible, comienzo con los valores seguros.

Eugene Smith (1918-1978) fue uno de los grandes clásicos del periodo del fotorreportaje, que de manos de las revistas ilustradas tuvo su apogeo en las décadas de los 1930, 40 y 50. Siempre defendió que el trabajo del fotógrafo iba más allá de producir imágenes bonitas para acompañar a un texto: las propias imágenes podían ser el centro de la historia, podían describir la verdad. Casi nada. Se propuso demostrarlo con su trabajo, realizando una serie de reportajes para la revista Life en los que demostraba una implicación, una empatía con las personas objeto de estudio, que, junto al dominio técnico le hicieron justamente famoso.

La exposición muestra alguno de esos trabajos. Comienza con uno que nos cae muy cerca, “Spanish Village”, reportaje realizado en 1950 en un pueblo de Extremadura (Deleitosa, difícil nombre para aquella época). Además del atraso y de las actividades campesinas tradicionales, vemos en toda su crudeza la miseria, el envilecimiento de la posguerra: todo está roto y viejo, todos, salvo los niños, miran al suelo con tristeza. Según parece, los de Life trataron de darle un enfoque más turístico-pintoresco, pero el material de Eugene Smith era demasiado bueno y soportó la andanada.

Le siguen dos reportajes sobre el ámbito rural norteamericano: Country Doctor y Nurse Midwife, este último sobre las tribulaciones de una comadrona, único personal sanitario para una comarca de 10.000 personas en Carolina del Sur. Es evidente el compromiso con la que el fotógrafo encara el trabajo, además de un dominio técnico admirable: utiliza todos los recursos del medio para hacernos llegar su mensaje; convierte en héroes a sus retratados. Otro de los reportajes, A Man of Mercy, sobre un misionero en África, logra un difícil equilibrio entre la personalidad del doctor Schweitzer, orgulloso y distante, y sus logros humanitarios. Fue el que provocó su ruptura con Life, al ignorar la revista las instrucciones del fotógrafo.

Eugene Smith, Country Doctor, 1948

Posteriormente, Eugene Smith se propuso una meta decididamente imposible, un ensayo fotográfico que reflejara todos los aspectos de la ciudad de Pittsburgh, al que dedicó varios años, y que le puso al borde de la ruina mental y económica. No logró su objetivo, pues produjo una obra impublicable por la amplitud del material mucho antes de que el autor la diera por terminada, pero lo que ha dejado es de calidad excepcional: fábricas y trenes, obreros manipulando el acero en el alto horno y niños jugando en un cruce, todo es parte de la ciudad, y debe ser descrito. La exposición dedica una sala entera a este proyecto, que es lo que más me ha impresionado.

Finalmente, también se muestran fotografías de su activismo medioambiental mucho antes de que estuviera de moda: en 1971, Minamata, una industria química en Japón estaba envenenando a los pescadores de la bahía. Tremendo el contraste entre el sufrimiento de los afectados y la frialdad de los funcionarios y ejecutivos de la fábrica. La aproximación de Eugene Smith, muy sincera, no aspira a documentar una “realidad objetiva” imposible de definir, sino que captura lo que él percibe, algo muy honesto consigo mismo y con los destinatarios de las fotos: nosotros.

Una exposición muy completa (cada uno de los reportajes citados se muestra con decenas de fotos), aunque algo agotadora, de uno de los grandes. Vayan a verla, se lo recomiendo.

Eugene Smith, Steelworker, 1955

No hay comentarios: