7 de septiembre de 2009

Evil cat

Al caer la tarde de un día de verano, las tejas del cobertizo del patio guardan el calor durante un par de horas. El gato se tiende, clava en mí sus ojos verdes,
y me vigila.




Mal día, seguro

Desde lo más alto

1 comentario:

Nuria dijo...

¡qué guapo!